La espelta es una variedad de trigo. Estuvo a punto de desaparecer por su bajo rendimiento productivo. Pero sus propiedades y valores nutricionales la han vuelto a poner de actualidad.
La espelta es rica en carbohidratos y proteínas. Supera al trigo convencional en cuanto a riqueza vitamínica, proteínas y minerales, así como en porcentaje de fibra dietética. Además aporta muchísimos minerales como cinc, fósforo, hierro, potasio, magnesio y vitaminas antioxidantes y anti cancerígenas (B1, B2 y B3; E; provitamina A y betacarotenos).
Su consumo diario equilibra los niveles de colesterol y triglicéridos y regula el metabolismo del azúcar. Refuerza el sistema inmunitario y circulatorio. Es muy apropiado tomar espelta si se sufren enfermedades degenerativas, patologías de la piel así como problemas del sistema digestivo.
Al igual que el trigo tradicional, la espelta se utiliza para elaborar harinas, galletas, pasta, pan, cerveza, copos y sémolas como el cous-cous.
Recomendación: para enriquecer nuestro organismo con su gran aporte nutricional es mejor que los productos sean de agricultura ecológica.
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